Los socialistas andaluces hemos presentado a la ciudadanía un programa electoral centrado en la creación de empleo y la recuperación económica. Eso es lo que demanda el tiempo presente y una garantía de que en los próximos cuatro años Andalucía dará los pasos necesarios para recuperar y avanzar en su calidad de vida y productividad.
Son muchas las propuestas que contiene el programa del PSOE, propuestas que a lo largo de estos días de campaña estamos presentando y explicando a los almerienses y andaluces. Yo lo considero riguroso y realista porque sabemos que para salir de la crisis hace falta reactivar la actividad económica y no paralizarla, como hace el PP con sus reformas laborales retrógradas y contrarias a lo que Andalucía quiere y necesita.
La reactivación económica no admite esperas pero tampoco medidas como la reforma laboral que sólo servirá para poner piedras en el camino del progreso real. El PSOE tiene nuevas iniciativas para facilitar la financiación de las pequeñas y medianas empresas, que son mayoría en el tejido productivo de nuestra Comunidad. Vamos a seguir apoyando a los grandes sectores que generan empleo y actividad económica, desde la agricultura a la piedra natural, el turismo, la construcción sostenible, los servicios de atención a las personas y las energías renovables. Menciono también algunos de los campos de actuación en los que el PSOE lleva años trabajando porque sabemos que son el presente y el futuro de nuestra sociedad.
El programa electoral que defendemos los socialistas se mantiene firme en la defensa de un sistema educativo público, gratuito y de calidad. Y con la misma firmeza rechaza cualquier tipo de copago sanitario.
Todas nuestras propuestas de acción política y normativa descansan en los principios de un buen gobierno al servicio de una mejor democracia. Bajo los gobiernos del PSOE, la Junta de Andalucía ha sido una administración participativa y abierta a la sociedad, sensible a sus necesidades y con capacidad para dar en cada momento la respuesta que se necesita. Ahora debemos profundizar en esta manera de hacer las cosas al servicio del interés general.
La Administración, como herramienta al servicio de la ciudadanía, debe ser transparente en el fondo y en la forma de sus actuaciones. Debe estar sometida al escrutinio público y político porque eso nos garantiza el correcto uso de los recursos públicos y de la rectitud de las decisiones que se adoptan en el ejercicio de su actividad.
La transparencia y la participación son requisitos que son incompatibles con la forma de entender la política que tiene y aplica el Partido Popular, que nunca ha creído en el reparto del poder sino en la concentración del mismo en muy pocas manos.
Una sociedad moderna y democrática en su funcionamiento requiere disponer de un contacto estructurado y permanente entre los ciudadanos y sus representantes parlamentarios. El PSOE asegurará esa comunicación porque es vital que unos y otros intercambien información. De esta manera aseguramos que las inquietudes, problemas y propuestas del ciudadano llegan a quienes tienen capacidad de atenderlas y satisfacerlas. De la otra parte, el representante político, cuya función no es otra que la de trabajar para los andaluces, hayan sido o no sus electores, se compromete a informar de su trabajo y del resultado del mismo ante los órganos políticos de decisión, como es el Parlamento de Andalucía.
El PSOE propugna una Andalucía próspera y justa, transparente en su gestión política y eficaz en sus medios de trabajo. Una Andalucía comprometida con la igualdad y con el bienestar de sus ciudadanos. Una Andalucía que no renunciará ni a un solo derecho adquirido.
Son muchas las propuestas que contiene el programa del PSOE, propuestas que a lo largo de estos días de campaña estamos presentando y explicando a los almerienses y andaluces. Yo lo considero riguroso y realista porque sabemos que para salir de la crisis hace falta reactivar la actividad económica y no paralizarla, como hace el PP con sus reformas laborales retrógradas y contrarias a lo que Andalucía quiere y necesita.
La reactivación económica no admite esperas pero tampoco medidas como la reforma laboral que sólo servirá para poner piedras en el camino del progreso real. El PSOE tiene nuevas iniciativas para facilitar la financiación de las pequeñas y medianas empresas, que son mayoría en el tejido productivo de nuestra Comunidad. Vamos a seguir apoyando a los grandes sectores que generan empleo y actividad económica, desde la agricultura a la piedra natural, el turismo, la construcción sostenible, los servicios de atención a las personas y las energías renovables. Menciono también algunos de los campos de actuación en los que el PSOE lleva años trabajando porque sabemos que son el presente y el futuro de nuestra sociedad.
El programa electoral que defendemos los socialistas se mantiene firme en la defensa de un sistema educativo público, gratuito y de calidad. Y con la misma firmeza rechaza cualquier tipo de copago sanitario.
Todas nuestras propuestas de acción política y normativa descansan en los principios de un buen gobierno al servicio de una mejor democracia. Bajo los gobiernos del PSOE, la Junta de Andalucía ha sido una administración participativa y abierta a la sociedad, sensible a sus necesidades y con capacidad para dar en cada momento la respuesta que se necesita. Ahora debemos profundizar en esta manera de hacer las cosas al servicio del interés general.
La Administración, como herramienta al servicio de la ciudadanía, debe ser transparente en el fondo y en la forma de sus actuaciones. Debe estar sometida al escrutinio público y político porque eso nos garantiza el correcto uso de los recursos públicos y de la rectitud de las decisiones que se adoptan en el ejercicio de su actividad.
La transparencia y la participación son requisitos que son incompatibles con la forma de entender la política que tiene y aplica el Partido Popular, que nunca ha creído en el reparto del poder sino en la concentración del mismo en muy pocas manos.
Una sociedad moderna y democrática en su funcionamiento requiere disponer de un contacto estructurado y permanente entre los ciudadanos y sus representantes parlamentarios. El PSOE asegurará esa comunicación porque es vital que unos y otros intercambien información. De esta manera aseguramos que las inquietudes, problemas y propuestas del ciudadano llegan a quienes tienen capacidad de atenderlas y satisfacerlas. De la otra parte, el representante político, cuya función no es otra que la de trabajar para los andaluces, hayan sido o no sus electores, se compromete a informar de su trabajo y del resultado del mismo ante los órganos políticos de decisión, como es el Parlamento de Andalucía.
El PSOE propugna una Andalucía próspera y justa, transparente en su gestión política y eficaz en sus medios de trabajo. Una Andalucía comprometida con la igualdad y con el bienestar de sus ciudadanos. Una Andalucía que no renunciará ni a un solo derecho adquirido.
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