El Gobierno andaluz vuelve a liderar la iniciativa en la lucha contra el desempleo con la aprobación de un plan para reactivar el empleo juvenil y facilitar a los emprendedores la constitución gratuita de empresas. Este programa, al que la Junta destina más de 200 millones de euros, se suma a los de choque ya puestos en marcha con los colectivos más vulnerables como principales destinatarios.
El nuevo programa, dirigido a jóvenes de entre 18 y 29 años, incluye cinco acciones, entre las que se encuentra la contratación de los beneficiarios por seis meses para obras y servicios de ámbito social o de especial interés por parte de los ayuntamientos. La Junta sufragará el 100% del coste salarial y de Seguridad Social de esos trabajos con casi 174 millones reservados para ello.
A esta iniciativa se suman otras orientadas a la realización de prácticas profesionales en empresas, a través de más de un millar de becas, o la elaboración de planes individualizados para mejorar la empleabilidad. Además, el plan también mejora el bono de empleo joven en vigor y contempla una línea de apoyo a las prácticas profesionales en I+D+i. Dentro del equilibrio territorial que prevalece en la acción de gobierno de la Junta, este último Decreto Ley distribuye la totalidad de ayudas entre las ocho provincias atendiendo a su peso poblacional y al porcentaje de jóvenes desempleados.
Pero junto a estas iniciativas, que no serán incompatibles con las de otros organismos o entidades privados dirigidas a impulsar la contratación juvenil, cabe destacar que la Junta también pondrá en marcha un servicio de apoyo para facilitar la creación de empresas de forma rápida y gratuita, comprometiéndose a correr con los gastos administrativos, notariales y de registro mercantil que conlleva.
No hay otro camino que este. Invertir en la creación de empleo debería de ser un objetivo prioritario para todas las administraciones, especialmente para el gobierno de Rajoy. Con una tasa de paro como la que sufrimos en la provincia de Almería –con más de 120 mil parados según la última Encuesta de Población Activa-, la recuperación a la que se aferra el PP es papel mojado.
Hasta que el crecimiento de la economía no llegue a pie de calle, hasta que no alcance a los ciudadanos, la salida de la crisis solo es mala propaganda y una baza a la que recurre la derecha dentro del juego sucio al que nos tiene acostumbrados.
El nuevo programa, dirigido a jóvenes de entre 18 y 29 años, incluye cinco acciones, entre las que se encuentra la contratación de los beneficiarios por seis meses para obras y servicios de ámbito social o de especial interés por parte de los ayuntamientos. La Junta sufragará el 100% del coste salarial y de Seguridad Social de esos trabajos con casi 174 millones reservados para ello.
A esta iniciativa se suman otras orientadas a la realización de prácticas profesionales en empresas, a través de más de un millar de becas, o la elaboración de planes individualizados para mejorar la empleabilidad. Además, el plan también mejora el bono de empleo joven en vigor y contempla una línea de apoyo a las prácticas profesionales en I+D+i. Dentro del equilibrio territorial que prevalece en la acción de gobierno de la Junta, este último Decreto Ley distribuye la totalidad de ayudas entre las ocho provincias atendiendo a su peso poblacional y al porcentaje de jóvenes desempleados.
Pero junto a estas iniciativas, que no serán incompatibles con las de otros organismos o entidades privados dirigidas a impulsar la contratación juvenil, cabe destacar que la Junta también pondrá en marcha un servicio de apoyo para facilitar la creación de empresas de forma rápida y gratuita, comprometiéndose a correr con los gastos administrativos, notariales y de registro mercantil que conlleva.
No hay otro camino que este. Invertir en la creación de empleo debería de ser un objetivo prioritario para todas las administraciones, especialmente para el gobierno de Rajoy. Con una tasa de paro como la que sufrimos en la provincia de Almería –con más de 120 mil parados según la última Encuesta de Población Activa-, la recuperación a la que se aferra el PP es papel mojado.
Hasta que el crecimiento de la economía no llegue a pie de calle, hasta que no alcance a los ciudadanos, la salida de la crisis solo es mala propaganda y una baza a la que recurre la derecha dentro del juego sucio al que nos tiene acostumbrados.
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