Sr. Presidente, está en Almería, una tierra de gente trabajadora y emprendedora, que vive del campo y del mar, de la naturaleza y de la piedra natural, del turismo, de la industria y de los servicios, que cada día se revela contra la geografía que nos sitúa en una esquina de España. Que no quiere ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie.
En Almería hemos alcanzado el pasado mes de septiembre la cifra de 83.039 parados. En la Encuesta de Población Activa que conoceremos la próxima semana seguramente serán alrededor de 130.000 las personas que estén desocupadas; es decir un 36% de la población en condiciones de trabajar. Desde que usted gobierna hay 11.000 desempleados más y más de la mitad de los meses transcurridos hemos tenido cifras por encima de los 80.000 parados.
La evolución de los datos es muy preocupante en dos de los segmentos estratégicos para Almería: agricultura y sector servicios. En ellos, se ha incrementado en 4.146 y 10.881, respectivamente, las personas paradas en los últimos tres años, a pesar de los buenos resultados que han arrojado las campañas agrícola y turística.
Los motivos de que esto sea así los encontramos en las menores ganancias de los agricultores por su trabajo, debido a la producción de bajo coste que se oferta desde países terceros y a que dentro de Europa hay países en los que los agricultores producen con ayudas directas de la Política Agraria Común porque así lo ha decidido su gobierno nacional. Aquí no.
También reduce los beneficios de los agricultores el no disponer de los corredores ferroviarios que otros sí tienen y que hace que les resulte más barato que a nosotros llevar los productos a los consumidores europeos. Esto, lógicamente, influye en el beneficio que le queda al agricultor, al igual que el encarecimiento del precio de la factura eléctrica, lastrando todo ello la creación de empleo.
La desventaja competitiva del sector turístico es otra causa de esta situación. Tenemos una excelente oferta turística pero carecemos de vuelos a precios asequibles y además vemos como el AVE acerca turistas a Cataluña, Valencia, Alicante o Málaga. Lo va a hacer próximamente a Murcia y Granada, que tiene prevista su llegada para 2015, mientras Almería está sin fechas y con trenes que tardan más de 6 horas en llegar desde Madrid.
Sus decisiones en materia de dependencia también han afectado al empleo en el sector servicios, al eliminar el pago del Estado a la Seguridad Social de las cuidadoras no profesionales y al quitar cada año 300 millones al Gobierno andaluz para este derecho.
Esta situación, sin embargo, tiene remedio. En gran medida depende de usted, de su voluntad política con esta provincia. Ya ha venido tres veces en esta Legislatura a Almería: una a apoyar a Arenas en las elecciones andaluzas; otra a una reunión del partido de infausto recuerdo para usted, porque coincidió con la difusión de la vida y andanzas de aquel tesorero al que usted le pedía que aguantara, y hoy suma la tercera, que espero sea la vencida y nos ayude en algo.
Puede hacerlo, depende de su voluntad: apruebe un plan de empleo para Andalucía. Si no sabe cómo, hable con Susana Díaz, que en el próximo mes le va a permitir al más senador que alcalde, Luis Rogelio Rodríguez, contratar a 800 personas en Almería.
Puede ayudar a los agricultores rectificando la tarifa eléctrica para que paguen solo por el consumo realmente realizado, o autorizando en 2016 que los productores de frutas y hortalizas reciban ayudas directas de la PAC, como hace Francia o Alemania.
Priorice la construcción de la línea eléctrica de gran capacidad desde Granada hasta Vera, crucial para nuestra industria y servicios. Autorice la plataforma logística que impulsamos en el anterior mandato socialista en el Ayuntamiento de Pulpí y que está dispuesta a invertir 80 millones de euros para sacar tres trenes diarios hacia Europa.
Elimine el castigo a las infraestructuras que Almería necesita. Dé una fecha para la llegada del AVE, presente un plan plurianual de inversiones que lo garantice; pida antes de febrero de 2015 dinero a Europa para ese plan y solucione el paso del AVE por Lorca, que es imprescindible para su llegada a Almería.
Ya concluyo, señor Presidente. Espero, finalmente, que haya venido a ayudar a los almerienses y no a rescatar a su partido, hundido por su mala gestión durante estos años, por tanto sufrimiento como está ocasionando a los más débiles y por su tozuda oposición contra Andalucía. Hoy y a partir de mañana tiene una magnífica oportunidad para demostrarlo.
En Almería hemos alcanzado el pasado mes de septiembre la cifra de 83.039 parados. En la Encuesta de Población Activa que conoceremos la próxima semana seguramente serán alrededor de 130.000 las personas que estén desocupadas; es decir un 36% de la población en condiciones de trabajar. Desde que usted gobierna hay 11.000 desempleados más y más de la mitad de los meses transcurridos hemos tenido cifras por encima de los 80.000 parados.
La evolución de los datos es muy preocupante en dos de los segmentos estratégicos para Almería: agricultura y sector servicios. En ellos, se ha incrementado en 4.146 y 10.881, respectivamente, las personas paradas en los últimos tres años, a pesar de los buenos resultados que han arrojado las campañas agrícola y turística.
Los motivos de que esto sea así los encontramos en las menores ganancias de los agricultores por su trabajo, debido a la producción de bajo coste que se oferta desde países terceros y a que dentro de Europa hay países en los que los agricultores producen con ayudas directas de la Política Agraria Común porque así lo ha decidido su gobierno nacional. Aquí no.
También reduce los beneficios de los agricultores el no disponer de los corredores ferroviarios que otros sí tienen y que hace que les resulte más barato que a nosotros llevar los productos a los consumidores europeos. Esto, lógicamente, influye en el beneficio que le queda al agricultor, al igual que el encarecimiento del precio de la factura eléctrica, lastrando todo ello la creación de empleo.
La desventaja competitiva del sector turístico es otra causa de esta situación. Tenemos una excelente oferta turística pero carecemos de vuelos a precios asequibles y además vemos como el AVE acerca turistas a Cataluña, Valencia, Alicante o Málaga. Lo va a hacer próximamente a Murcia y Granada, que tiene prevista su llegada para 2015, mientras Almería está sin fechas y con trenes que tardan más de 6 horas en llegar desde Madrid.
Sus decisiones en materia de dependencia también han afectado al empleo en el sector servicios, al eliminar el pago del Estado a la Seguridad Social de las cuidadoras no profesionales y al quitar cada año 300 millones al Gobierno andaluz para este derecho.
Esta situación, sin embargo, tiene remedio. En gran medida depende de usted, de su voluntad política con esta provincia. Ya ha venido tres veces en esta Legislatura a Almería: una a apoyar a Arenas en las elecciones andaluzas; otra a una reunión del partido de infausto recuerdo para usted, porque coincidió con la difusión de la vida y andanzas de aquel tesorero al que usted le pedía que aguantara, y hoy suma la tercera, que espero sea la vencida y nos ayude en algo.
Puede hacerlo, depende de su voluntad: apruebe un plan de empleo para Andalucía. Si no sabe cómo, hable con Susana Díaz, que en el próximo mes le va a permitir al más senador que alcalde, Luis Rogelio Rodríguez, contratar a 800 personas en Almería.
Puede ayudar a los agricultores rectificando la tarifa eléctrica para que paguen solo por el consumo realmente realizado, o autorizando en 2016 que los productores de frutas y hortalizas reciban ayudas directas de la PAC, como hace Francia o Alemania.
Priorice la construcción de la línea eléctrica de gran capacidad desde Granada hasta Vera, crucial para nuestra industria y servicios. Autorice la plataforma logística que impulsamos en el anterior mandato socialista en el Ayuntamiento de Pulpí y que está dispuesta a invertir 80 millones de euros para sacar tres trenes diarios hacia Europa.
Elimine el castigo a las infraestructuras que Almería necesita. Dé una fecha para la llegada del AVE, presente un plan plurianual de inversiones que lo garantice; pida antes de febrero de 2015 dinero a Europa para ese plan y solucione el paso del AVE por Lorca, que es imprescindible para su llegada a Almería.
Ya concluyo, señor Presidente. Espero, finalmente, que haya venido a ayudar a los almerienses y no a rescatar a su partido, hundido por su mala gestión durante estos años, por tanto sufrimiento como está ocasionando a los más débiles y por su tozuda oposición contra Andalucía. Hoy y a partir de mañana tiene una magnífica oportunidad para demostrarlo.
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