sábado, 8 de febrero de 2014

El PP pone contra las cuerdas a los pensionistas


Se ha hecho habitual hasta no parecernos extraño que nuestros mayores, las abuelas y abuelos, tiren de toda la familia con los escasos recursos económicos de los que disponen con su pensión. Es fácil ver en los supermercados cómo la abuela hace, a la vez, la compra para sí misma y para su hija o su hijo que ha tenido que meterse en la casa con su pareja y los niños. Que esto, desgraciadamente, sea habitual no quiere decir que sea normal.


Esta es la difícil situación que están atravesando muchos de los pensionistas de nuestra provincia, la mayoría de los cuales cobran pensiones de menos de 700 euros al mes. Con eso tienen que apañarse en muchos hogares familias enteras. A este precario escenario hay que unir todas las medidas que ha ido aprobando el Gobierno de Rajoy que han disparado los gastos que tienen que afrontar los pensionistas. Y ese demoledor recuento de sumas y sigues es imposible compensarlo con el poco más de un euro de media que han crecido este año las pensiones. Especialmente si estas son muy bajas, tal y como ocurre en Almería.

Los pensionistas almerienses cobran una media de 702,14 euros al mes, la cifra más baja de Andalucía y la tercera más baja de España, sólo por detrás Lugo y Orense. Además, de los 96.798 pensionistas de la provincia almeriense, la gran mayoría (65.900) cobran menos de 700 euros. Pese a estas cifras, los pensionistas almerienses han visto subir sus pensiones apenas un 0,25%, una ridiculez que debería avergonzar a Rajoy, con la que es imposible compensar, no sólo la grave pérdida del poder adquisitivo que han tenido desde la llegada del PP al Gobierno hace dos años, de entre un 2 y un 3%, sino la escalada de gastos que están padeciendo a través de la subida de impuestos como el IVA o de los gastos corrientes como la electricidad.

Sin embargo, resulta especialmente bochornoso que el Gobierno de Rajoy haya actualizado el copago de los medicamentos en la misma medida que el IPC, un 1,47%, un porcentaje mucho mayor que el 0,25% de subida de las pensiones. Es decir, actualiza con el incremento del índice de precios las medicinas, pero no las pensiones. Además, los 415 medicamentos que han salido del sistema público, muchos de los cuales son de uso frecuente y que ahora hay que pagar, han incrementado su precio en un 65%.

En la carga para el bolsillo de los pensionistas que suponen los copagos sanitarios, el Gobierno del PP está creando un estado de caridad universal y se olvida de su obligación de garantizar los servicios esenciales a todos los ciudadanos. La implantación del copago de las recetas, ha provocado, según distintos estudios, que hasta el 17% de los pensionistas no estén retirando la medicación completa que necesitan porque no pueden pagarla, lo que convierte una situación económica difícil en un drama en el que se pone en riesgo la propia vida o se compromete seriamente la salud. Hasta ese extremo ha llegado este Gobierno, hasta ese límite de insensible brutalidad que ha puesto contra las cuerdas a los pensionistas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario