La derecha ha decidido sancionar de nuevo a los pensionistas. Si el castigo infligido hasta ahora a nuestros mayores ha sido tremendo, sumen además que para muchas de estas personas, para aquellas que emigraron, el PP ha convertido su día a día en una preocupación permanente. Esto es así porque desde marzo de 2013 el Gobierno de Rajoy está obligando a tributar las pensiones procedentes de otros países con carácter retroactivo desde el ejercicio de 2008. Hasta entonces, la Administración siempre había informado a los emigrantes retornados de que no era necesario declararlas. Sin embargo, esto ha dejado de ser así desde que el ministro Montoro decidió aplicarse a fondo contra los más vulnerables y amnistiar a los ricos.
Hacienda, además, está yendo un poco más allá en su ataque a este colectivo abriéndoles expedientes sancionadores y aplicando intereses de demora que aumentan en más de un 25% la cantidad final a abonar. Estamos hablando de pequeñas pensiones, en la mayoría de los casos, por lo que como todo el mundo se puede imaginar el daño moral y económico que se está ocasionado a estas personas, unas 19.000 en la provincia de Almería, es insufrible.
En su afán recaudatorio, el PP incluso ha obviado convenios como el suscrito con Alemania en 1966, en vigor hasta octubre de 2012, por el que se eximía de cotizar a quienes perciben una pensión pública inferior a 22.000 euros anuales.
Los emigrantes retornados no son delincuentes fiscales, sino trabajadores y trabajadoras que se fueron a países como Suiza, Alemania, Francia o Bélgica y ayudaron a levantar España con sus divisas. Estos pensionistas, en todo caso, no quieren ser amnistiados, sino que no se les trate como a defraudadores fiscales, tal y como lo está haciendo el Gobierno de Rajoy.
Ante la gravedad de estos hechos, desde el PSOE hemos iniciado una campaña informativa para defender sus intereses y hemos presentado mociones en ayuntamientos y diputaciones. También hemos elevado al Congreso una Proposición de Ley Reguladora de las Medidas Tributarias para las Rentas no Declaradas de Emigrantes Retornados. En ella se recoge que estos ingresos sean regularizados con carácter excepcional mediante autoliquidación complementaria, sin sanción, ni intereses de demora ni recargos.
Desde el PSOE estamos defendiendo, por lo tanto, algo que consideramos justo. Especialmente, en un momento en el que la derecha que nos gobierna está sancionado a nuestros mayores, no solo con estas medidas sino también a través de la subida de impuestos, el repago de las medicinas o la negativa a revalorizar sus pensiones.
Hacienda, además, está yendo un poco más allá en su ataque a este colectivo abriéndoles expedientes sancionadores y aplicando intereses de demora que aumentan en más de un 25% la cantidad final a abonar. Estamos hablando de pequeñas pensiones, en la mayoría de los casos, por lo que como todo el mundo se puede imaginar el daño moral y económico que se está ocasionado a estas personas, unas 19.000 en la provincia de Almería, es insufrible.
En su afán recaudatorio, el PP incluso ha obviado convenios como el suscrito con Alemania en 1966, en vigor hasta octubre de 2012, por el que se eximía de cotizar a quienes perciben una pensión pública inferior a 22.000 euros anuales.
Los emigrantes retornados no son delincuentes fiscales, sino trabajadores y trabajadoras que se fueron a países como Suiza, Alemania, Francia o Bélgica y ayudaron a levantar España con sus divisas. Estos pensionistas, en todo caso, no quieren ser amnistiados, sino que no se les trate como a defraudadores fiscales, tal y como lo está haciendo el Gobierno de Rajoy.
Ante la gravedad de estos hechos, desde el PSOE hemos iniciado una campaña informativa para defender sus intereses y hemos presentado mociones en ayuntamientos y diputaciones. También hemos elevado al Congreso una Proposición de Ley Reguladora de las Medidas Tributarias para las Rentas no Declaradas de Emigrantes Retornados. En ella se recoge que estos ingresos sean regularizados con carácter excepcional mediante autoliquidación complementaria, sin sanción, ni intereses de demora ni recargos.
Desde el PSOE estamos defendiendo, por lo tanto, algo que consideramos justo. Especialmente, en un momento en el que la derecha que nos gobierna está sancionado a nuestros mayores, no solo con estas medidas sino también a través de la subida de impuestos, el repago de las medicinas o la negativa a revalorizar sus pensiones.
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