La salud y el empleo son dos de las mayores preocupaciones en la vida de cualquier persona, pero especialmente lo son en un tiempo como el que estamos viviendo. Las restricciones sanitarias impuestas para frenar la pandemia han tenido consecuencias dramáticas sobre la tasa de actividad, dejando a muchas familias en una situación tan complicada que se hace ineludible atender con la máxima urgencia sus necesidades más básicas y, muy especialmente, las relacionadas con el empleo.