domingo, 15 de diciembre de 2013

Los negocios del PP


Muy pocos españoles se reconocen ya en un país que fue todo un ejemplo por sus extraordinarios avances en Sanidad, Educación e Igualdad de Oportunidades y que ahora pelea por no descender algún escalón más en esa escalera que lleva a muchos ciudadanos a un callejón sin salida. Tampoco nadie se ve reflejado en una España donde las corporaciones locales van a perder capacidad de decisión a la hora de atender a sus vecinos en una materia tan sensible y necesaria como los servicios sociales.

sábado, 14 de diciembre de 2013

Rajoy no nos representa


Mariano Rajoy ha vuelto a rozar el ridículo – si es que no lo ha traspasado ya del todo – esta semana en los funerales del que fuera presidente sudafricano, Nelson Mandela. En Johannesburgo, en un momento conmovedor por la talla de la extraordinaria figura a la que se rendía homenaje, Rajoy no tuvo otra ocurrencia que destacar que “este estadio de fútbol en el que se va a despedir a Mandela es el estadio donde España además se proclamó campeona del Mundo (…) con lo cual es realmente un momento muy bonito y muy emocionante" ¿Cómo se puede llevar un comentario sobre el funeral de Mandela a un terreno tan absurdo? ¿Se puede ser más inconsistente? ¿Puede representar a los españoles y a España alguien que suelta lo primero que se le ocurre? Sinceramente, creo que no, que Rajoy no nos representa.

La ley mordaza del PP


El Gobierno del PP quiere poner coto a la libertad de protestar y expresarse sin violencia, con una Ley mordaza a la que eufemísticamente llama Ley de Seguridad Ciudadana. Esta demoledora iniciativa, que no surge de una necesidad real, nace de la intención de la derecha de impedir los escraches o las protestas ciudadanas no violentas frente a instituciones como el Congreso de los Diputados, a base de multas y acciones policiales para alejar aún más a los ciudadanos de los lugares donde la política decide su futuro.

domingo, 1 de diciembre de 2013

El miedo y la amenaza

Miedo y amenaza, estos son los dos conceptos emocionales que está manejando el Partido Popular con una extraordinaria vileza para sembrar la incertidumbre entre los beneficiarios de los servicios sociales que se prestan desde las instituciones que gobiernan. Esta estrategia, que nace como una deshumanizada arma política, enfrenta a los más débiles, a las personas dependientes, a una situación de desamparo que añade más sufrimiento a quienes ya soportan una situación personal o familiar complicada.