¿Por qué un pacto por Almería?

Durante los días de la semana que hemos dejado atrás ha comenzado a tomar cuerpo una propuesta que los socialistas ya planteamos en los primeros días de este año, la necesidad de construir, de alcanzar, entre todos y todas un gran acuerdo por Almería que partiendo de los problemas, de las necesidades concretas, esas que tienen nombre y apellidos, diese respuestas a temas cercanos y específicos que tienen, que tenemos, las personas que vivimos en todos los pueblos de nuestra provincia y en la ciudad.

El pacto por Almería es una necesidad ante la situación dramática que afecta a muchos y muchas almerienses que quieren trabajar y no pueden… jóvenes más que formados, mujeres, parados de larga duración o a personas cuya edad puede ser una dificultad añadida a la crisis. Más de 80.000 almerienses están oficialmente inscritos en la oficina de desempleo, pero según la Encuesta de Población Activa son 136.000 los que quieren trabajar y no encuentran trabajo. Tener un 60% de paro juvenil, más de un 40% de personas paradas sin recibir ingreso alguno y muchas familias con todos sus miembros en paro nos obligan no a mirar a otros en busca de soluciones, sino a mirarnos a nosotros mismos para sumar y tratar de darle la vuelta a esos datos.

Ni los más pesimistas se podían imaginar que en apenas pocos años el futuro fuese más negro que el pasado o el presente. Yo también, como decía en una entrevista Antonio Ávila, consejero de Economía de la Junta de Andalucía, me niego a pensar que el futuro tiene que ser peor y me niego a no hacer todo lo que pueda para que mis hijos tengan una sociedad mejor que la que yo he recibido. Todos podemos hacer algo ante esa realidad o amenaza cierta y debemos de hacerlo. Esa es la única aspiración, ese es el objetivo que persigue el pacto por Almería que proponemos: Hagamos más.

Lo visto y vivido a lo largo de los últimos cinco o seis años pone de manifiesto una desconfianza generalizada hacia la economía, la política, los medios de comunicación, o lo que es lo mismo un reproche generalizado a los actores principales que han movido los hilos de la sociedad, hacia los políticos y hacia los dueños de los medios de comunicación, que no son los periodistas, sino quienes les pagan, porque entienden los ciudadanos que ha faltado honestidad, sinceridad, transparencia y lealtad con los valores, actitudes y principios que deben regir a una persona en el ejercicio de esas actividades. No voy a entrar en si ha sido lo general o la excepción, me basta con que haya sido, y el pacto por Almería también es una oportunidad para comprometernos y poner de manifiesto esos valores, principios o actitudes que, cada uno en lo suyo, nos deben hacer ejemplares y ejemplarizantes.

Como se suele decir, a la hora de alcanzar una meta, y superar la crisis es la meta, cada uno puede hacer la guerra por su cuenta o por el contrario podemos actuar de manera coordinada, lo cual no quiere decir que se renuncie a las posiciones ideológicas que cada uno tenga. Se trata de encontrar puntos de entendimiento, que seguro que los tenemos y de llevarlos a la práctica; se trata de ir todos a una, de compartir una hoja de ruta común para ayudar a superar las principales dificultades por las que estamos pasando, como lo es el desempleo, el deterioro de derechos como el de la vivienda o en servicios públicos como la Educación, Sanidad o Dependencia.

Estoy convencido de que todos JUNTOS podemos hacer algo más de lo que ya estamos haciendo por superar los problemas. Públicos y privados estamos luchando contra la crisis, ahora se trata de seguir haciéndolo, además, uniendo fuerzas. No me resigno, no acepto que no podamos trabajar juntos para hacer cosas que se sumen a lo que estamos haciendo, que claramente es insuficiente.