La educación pública es la herramienta más valiosa que tenemos para luchar contra la desigualdad. Garantizar que todos los alumnos y las alumnas que cursan sus estudios en centros públicos tengan las mismas oportunidades, debe de ser uno de los principales objetivos de cualquier gobernante. La educación es el ascensor social que permite que cada uno llegue hasta donde le permita su esfuerzo y capacidad, y bajo esa premisa, resulta fundamental que las posibilidades económicas de las familias no sean una traba a la hora de emprender ese camino.
Con esa idea de lo que debe ser la enseñanza pública, el Gobierno andaluz sigue trabajando para dotarla de mayor calidad, desde el convencimiento de que la educación es el motor del desarrollo de Andalucía. En ese contexto, la próxima semana más de 157.000 alumnos y alumnas de enseñanzas no universitarias se incorporan en Almería a las aulas de 660 centros públicos, concertados y privados, atendidos por más de 10.078 docentes, lo que supone incrementar la plantilla con respecto al año anterior a pesar de que el número de alumnos, por razones demográficas, ha disminuido.
En todo caso, en este nuevo curso, la Junta mantiene y amplía los programas que favorecen la igualdad de oportunidades y el apoyo a las familias dentro del sistema educativo. En Andalucía, a diferencia de lo que ocurre en el resto de comunidades autónomas, se mantiene la gratuidad de libros de texto en las enseñanzas obligatorias y la gratuidad del transporte escolar. Además, no se incrementan los precios públicos de las escuelas infantiles de 0 a 3 años ni de los servicios complementarios (aula matinal, actividades extraescolares y comedor) a la vez que se mantiene el sistema de bonificaciones que permite, por ejemplo, que más de la mitad de los usuarios de comedores escolares acceda a este servicio de forma gratuita.
La Junta también incluirá en este nuevo curso importantes mejoras, como la implantación progresiva de la segunda lengua extranjera en Primaria, la puesta en marcha del Plan de Éxito Educativo 2016-2020 y la transformación de la Formación Profesional. Frente a la implantación de estas medidas, no podemos olvidar que entra en vigor la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa, la llamada Lomce. A pesar de que el Gobierno andaluz está en total desacuerdo con el modelo educativo que ha impuesto el Partido Popular –que habrá que asumir para cumplir con la legalidad- se aplicará de manera que su desarrollo sea lo menos lesivo posible para el conjunto de la comunidad educativa.
Entre tanto, la Junta de Andalucía va a trabajar también en los próximos meses en la mejora de las infraestructuras educativas. De esta manera, el Plan de Inversiones 2016-2017 prevé 36 actuaciones de construcción, reforma y ampliación de centros en la provincia con una inversión que supera los 13 millones de euros.
De esta manera, la educación pública y de calidad en Andalucía se convierte un año más en todo un referente en el conjunto del país y demuestra con hechos el compromiso del Gobierno que preside Susana Díaz con la igualdad de oportunidades.
Frente a los duros recortes aplicados por el Gobierno de Rajoy, nuestra presidenta no ha cejado en su empeño de que todos los jóvenes, independientemente del nivel de renta de sus familias, puedan estudiar y llegar donde deseen. Ese es el verdadero éxito de esta apuesta, que nuestros hijos e hijas tengan la plena convicción de que su única limitación a la hora de conseguir sus objetivos será su empeño y su esfuerzo personal.
Con esa idea de lo que debe ser la enseñanza pública, el Gobierno andaluz sigue trabajando para dotarla de mayor calidad, desde el convencimiento de que la educación es el motor del desarrollo de Andalucía. En ese contexto, la próxima semana más de 157.000 alumnos y alumnas de enseñanzas no universitarias se incorporan en Almería a las aulas de 660 centros públicos, concertados y privados, atendidos por más de 10.078 docentes, lo que supone incrementar la plantilla con respecto al año anterior a pesar de que el número de alumnos, por razones demográficas, ha disminuido.
En todo caso, en este nuevo curso, la Junta mantiene y amplía los programas que favorecen la igualdad de oportunidades y el apoyo a las familias dentro del sistema educativo. En Andalucía, a diferencia de lo que ocurre en el resto de comunidades autónomas, se mantiene la gratuidad de libros de texto en las enseñanzas obligatorias y la gratuidad del transporte escolar. Además, no se incrementan los precios públicos de las escuelas infantiles de 0 a 3 años ni de los servicios complementarios (aula matinal, actividades extraescolares y comedor) a la vez que se mantiene el sistema de bonificaciones que permite, por ejemplo, que más de la mitad de los usuarios de comedores escolares acceda a este servicio de forma gratuita.
La Junta también incluirá en este nuevo curso importantes mejoras, como la implantación progresiva de la segunda lengua extranjera en Primaria, la puesta en marcha del Plan de Éxito Educativo 2016-2020 y la transformación de la Formación Profesional. Frente a la implantación de estas medidas, no podemos olvidar que entra en vigor la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa, la llamada Lomce. A pesar de que el Gobierno andaluz está en total desacuerdo con el modelo educativo que ha impuesto el Partido Popular –que habrá que asumir para cumplir con la legalidad- se aplicará de manera que su desarrollo sea lo menos lesivo posible para el conjunto de la comunidad educativa.
Entre tanto, la Junta de Andalucía va a trabajar también en los próximos meses en la mejora de las infraestructuras educativas. De esta manera, el Plan de Inversiones 2016-2017 prevé 36 actuaciones de construcción, reforma y ampliación de centros en la provincia con una inversión que supera los 13 millones de euros.
De esta manera, la educación pública y de calidad en Andalucía se convierte un año más en todo un referente en el conjunto del país y demuestra con hechos el compromiso del Gobierno que preside Susana Díaz con la igualdad de oportunidades.
Frente a los duros recortes aplicados por el Gobierno de Rajoy, nuestra presidenta no ha cejado en su empeño de que todos los jóvenes, independientemente del nivel de renta de sus familias, puedan estudiar y llegar donde deseen. Ese es el verdadero éxito de esta apuesta, que nuestros hijos e hijas tengan la plena convicción de que su única limitación a la hora de conseguir sus objetivos será su empeño y su esfuerzo personal.
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