lunes, 29 de octubre de 2012
Cuesta abajo y sin frenos
El país se encamina por una senda dramática y vertiginosa hacia los seis millones de parados, una cifra para la que se quedan cortos todos los adjetivos y todas las reflexiones. Hasta los más de 5.778.000 parados que refleja la Encuesta de Población Activa, de los que 143.700 corresponden a Almería, hemos llegado por distintas razones, como la drástica reducción del gasto público, pero sobre todo por la nefasta gestión económica y social que está realizando el Gobierno de Rajoy de la crisis en la que estamos sumidos. Si a eso añadimos la injusta e inútil Reforma Laboral aprobada por el Partido Popular, nos encontramos ante un sobrecogedor escenario, ante la tormenta perfecta, de la mayor destrucción de empleo que pudiéramos imaginar. El Partido Popular ha cargado durante estos meses de gobierno los efectos de la crisis económica sobre los más débiles para situarla en una crisis social de enormes proporciones, tal y como demuestran los datos del desempleo que no dejan de incrementarse.
Hace 7 meses, cuando el Gobierno de Rajoy aprobó esta Reforma y la puso en vigor, el PSOE denuncio que en plena recesión, no crearía empleo sino más paro; que acabaría con la negociación colectiva y que quitaba derechos a los trabajadores y facilitaba el despido. Y eso es lo que ha pasado según demuestran los resultados de la aplicación de la reforma laboral, durante estos meses.
Las cifras y los datos que nos ofrece la realidad de la nefasta gestión económica que está haciendo el Gobierno de Rajoy y su nula apuesta por medidas que incidan en la creación de empleo, hablan por sí solas: la tasa de paro se ha desbordado hasta situarse por encima del 25%, lo que quiere decir que 1 de cada 4 españoles se encuentra en paro. Las solicitudes de prestaciones por desempleo han crecido un 34% y los convenios colectivos registrados han bajado un 37%, lo que pone de relieve el daño sin paliativos que está haciendo esta reforma.
Los socialistas, que hemos presentado un recurso ante el Tribunal Constitucional contra esta reforma laboral, volvemos hoy a insistir en que la reforma vulnera derechos constitucionales de los trabajadores, dinamita el marco de relaciones laborales existente en España desde hace décadas y es, además, un disparate en lo económico, como demuestran los resultados de su aplicación durante estos meses. Pero es que también abre la puerta a lo que se denomina “dumping social”, es decir, trabajadores con salarios bajos, explotados y sin derechos. Estamos, por lo tanto, ante una reforma ideológica en la que el PP ha hecho realidad el sueño de la derecha más radical de nuestro país y que nos lleva cuesta abajo y sin frenos hacia un paisaje desolador, del que sobresale la necesidad y la urgencia de una rectificación a la totalidad de la gestión del Gobierno de Rajoy.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario