Luchemos contra la pobreza

El miércoles 17 de octubre fue el Día Internacional para la erradicación de la pobreza, una prioridad para la organización política a la cual pertenezco, y cuya causa nos debe comprometer a todos los hombres y mujeres progresistas, ya que la sociedad que queremos debe tener a la igualdad de oportunidades y la solidaridad como principios básicos de nuestra convivencia.


La terrible crisis y la gestión que de ella están haciendo los gobiernos conservadores de toda Europa nos están llevando a una situación crítica para millones de personas: sin empleo, sin dinero, sin comida. Los sacrificios están siendo mal repartidos, los brutales recortes están perjudicando a miles de ciudadanos y ciudadanas hasta el punto de conducirlos cada día más cerca de la pobreza, mientras que sí hay dinero para los especuladores económicos que han provocado esta crisis y que nos mantienen en ella. Las cifras son estremecedoras: uno de cada cuatro españoles se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social, 1,7 millones de hogares españoles tienen a todos sus miembros en paro y hay más de 300 desahucios diarios en España.

Ante esta dramática situación, el Gobierno del Partido Popular ha presentado unos presupuestos demoledores que recortan en más de 1.100 millones los recursos destinados a políticas sociales y reducen un 40% la partida para servicios sociales básicos, la que se destina a los Ayuntamientos para atender las ayudas de emergencia. En cambio sí hay 38.000 millones de euros para intereses de la deuda.

Los progresistas de este país tenemos que diferenciarnos de los conservadores, en la crítica, en las propuestas y en la acción, por eso denunciamos la injusticia que suponen los Presupuestos de Rajoy que ignoran a los más débiles, que no leerán este periódico, porque no se lo pueden permitir. Yo creo firmemente que hay otra forma de hacer política, donde atender las necesidades básicas de toda la población es un deber fundamental, ya que vivimos en un estado que se define como SOCIAL desde el artículo primero de su Constitución.

No nos podemos limitar a criticar lo que no nos parece bien, por eso, hemos registrado dos iniciativas parlamentarias para defender los derechos y la dignidad de quienes más lo necesitan. La primera de ellas, para que se ponga en marcha un Fondo Estatal de Emergencia para las Familias, dotado con mil millones de euros, con el objetivo de rescatar a las personas en riesgo de exclusión. Y la segunda es una Proposición no de Ley para el fortalecimiento de los Bancos de Alimentos y el mantenimiento de programas de ayuda alimentaria a las personas más necesitadas.

Con esta partida de mil millones se atenderían las necesidades básicas de mucha gente y se evitaría que caigan aún más en una situación de pobreza muchas familias. La crisis económica con la que el capital alemán se está forrando, está empobreciendo a las familias y dejando en el paro a miles de personas, medio millón de parados más desde que gobierna Mariano Rajoy, que amenaza con aumentar esta cifra en los próximos meses. En este contexto, el Gobierno andaluz quiere pasar a la acción y por eso está trabajando para que sus presupuestos recojan dinero para atender a los andaluces que se encuentran en una situación de emergencia social, como consecuencia de las medidas de empobrecimiento continuo que está tomando el Gobierno de Mariano Rajoy, que vacía los bolsillos de unos para darle el dinero a los que tienen y quieren más: los especuladores económicos. Ponerse del lado de aquellos que peor lo que están pasando no es una opción, es una obligación. No existe nada en este momento más urgente.