Nuestra agricultura hace años que se abrió al mundo. El mercado donde se vende la producción hortofrutícola de Almería rebasa los límites de España y en algunos casos de la UE. Nuestra hortofruticultura está abierta a la globalización, de ahí ha venido su expansión y crecimiento, sin embargo no hemos logrado, aunque perseguimos desde hace años, concentrar a los productores para que juntos puedan salir al mundo a competir unidos.
Ahora que se plantea la revisión de la Política Agraria Comunitaria de la UE se hace más necesario que nunca que el sector productor de Almería esté unido para que cobre la fuerza necesaria para defender sus intereses. Mejorar la renta de los productores y resolver la situación generalizada de bajos precios en origen dependen de ello.
Necesitamos potenciar las Organizaciones de Productores para favorecer la concentración de la oferta, y como ya vienen demandando las organizaciones agrarias y la consejera de Agricultura, se tiene que contar también con la participación en estas organizaciones de los distribuidores. Así se podrá asegurar que los productos tengan precios más estables y que se reduzcan costes de distribución.
Un agricultor nunca debería percibir por su cosecha, si tiene la calidad esperada, menos de lo que ha invertido en sacarla adelante. La competencia de la producción de Almería con la de otros países afecta considerablemente al precio que percibe el agricultor, algo que lleva con frecuencia a que los precios de devalúen.
Si competimos en igualdad de condiciones con otros países podemos entender cierta volatilidad en los precios, pero en el caso de competir con países que no tienen el mismo nivel de calidad y seguridad alimentaria que los que deben cumplir los países comunitarios las condiciones del mercado se vuelven totalmente injustas para nuestros productores.
La producción de la provincia ha aumentado en septiembre, octubre y noviembre debido a las altas temperaturas, pero la demanda del mercando nacional ha sido débil y los precios no se han recuperado después de la situación del mercado en verano, además de que se ha incrementado la superficie explotada en otras zonas productoras, como del pimiento en Israel y del tomate en Polonia y Marruecos.
Nuestra agricultura no puede permitirse dar un paso atrás en los logros alcanzados. Una de las reglas más básicas para conseguir el éxito en las exportaciones de cualquier producto es que estas se hagan de forma conjunta y coordinada, porque sólo así se podrá ampliar el mercado y tener peso suficiente en él para regular las condiciones de la comercialización. Unidos seremos más fuertes y mejores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario