La semana pasada conocimos el proyecto de Presupuestos del Estado y esta semana hemos conocido el de la Junta de Andalucía para el año 2021, dos instrumentos decisivos a la hora de dar respuestas a la complicada situación que vivimos a causa de la Covid-19. En ellos se indica el dinero que van a destinar los gobiernos de Pedro Sánchez en España y de Moreno Bonilla en Andalucía para hacer realidad las políticas que pretenden impulsar durante el próximo año.
En los presupuestos del Estado se apuesta de manera decidida por la protección de las personas y por la adaptación de la economía española a los complicados tiempos que vivimos, impulsando su modernización y competitividad. Las cuentas de Moreno Bonilla, por el contrario, son continuistas, como si fuesen las de un año más. Se echan en falta propuestas de calado para impulsar la creación de empleo o reactivar la economía en Andalucía y no se aprovecha el incremento en la financiación del Estado para blindar los servicios públicos.
En un análisis de las repercusiones de estos presupuestos para el presente y futuro de Almería, lo primero que llama la atención es que mientras que para el Gobierno del presidente Pedro Sánchez los almerienses somos los primeros del país en inversión por habitante, con 910 euros de inversión por almeriense, para el Gobierno de Moreno Bonilla los almerienses somos de los últimos de Andalucía, con una inversión provincializada de 216 euros por almeriense.
De otro lado, el peso de Almería en los presupuestos del Estado ha aumentado de manera muy notoria, pasando de los 80 euros por habitante que contempló el último presupuesto del Gobierno de Rajoy, a los 910 euros por almeriense que contempla invertir el Gobierno de Pedro Sánchez. Ese cambio en el peso de Almería en los presupuestos del Estado nos va a permitir que veamos, desde la Autovía del Mediterráneo, cómo avanzan las obras del tren de alta velocidad hasta la ciudad de Almería durante los próximos años y cómo mejoran las comunicaciones, la seguridad o las infraestructuras hídricas, portuarias o aeroportuarias, que generarán un empleo muy necesario en estos momentos y darán mayores opciones a nuestra provincia.
En contraposición a esta realidad, Almería pierde peso en los presupuestos de Moreno Bonilla, que nos sitúan a la cola de Andalucía y nos hacen retroceder en varios indicadores, como el relativo a las inversiones. De hecho, somos los últimos en incremento de la inversión provincializada. La media de ese incremento en el total de las provincias andaluzas es de un 26% y a Almería se le deja en un 8%. La mayor inversión que facilita Pedro Sánchez con los 1.500 millones de euros extra que le da a Andalucía solo se traduce para Almería en un incremento en la inversión de 12 millones de euros para 2021. Hay provincias que incrementan su inversión hasta en 9 y 10 veces más que Almería con ese dinero extra del Gobierno de España.
Esta pérdida de peso de Almería en el presupuesto de Moreno Bonilla tiene consecuencias. Por ejemplo para la agricultura, que también pierde peso en el presupuesto provincializado. Carmen Crespo, en dos años en la Consejería de Agricultura, ha reducido un 25% el peso de su Consejería en la inversión provincializada para Almería, recortando drásticamente partidas para modernizar invernaderos, para la incorporación de jóvenes o para obras hidráulicas, que bajan casi a la mitad en relación con el año pasado.
En 2021 el peso de Almería baja en el presupuesto de Andalucía y sube en el de España. En el trámite de enmiendas Moreno Bonilla y los suyos pueden rectificar este castigo incompresible a los almerienses, porque nosotros se le vamos a pedir que Almería no pierda peso en el presupuesto de Andalucía.
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