Los socialistas andaluces hemos puesto en marcha una campaña informativa con la que pretendemos acercarnos a todos los ciudadanos para explicarles de tu a tu los recortes y medidas que lleva aplicando el Gobierno de Rajoy desde que asumiera la presidencia del país hace siete meses. Esta campaña, que tuvo su inicio el pasado viernes en una docena de municipios de la provincia de Almería, y que tendrá continuidad en las próximas semanas en otras tantas localidades, hace especial hincapié en los ataques que está perpetrando en Gobierno del PP contra Andalucía y los andaluces. Detallamos, uno por uno, los brutales recortes que está acometiendo el Gobierno de Rajoy en materias como la sanidad, la educación o la Ley de Dependencia y cómo castiga a pensionistas, desempleados, autónomos, empresas y a las familias en general, con subidas de impuestos como el IVA, IRPF, IBI, o servicios como la electricidad o el gas. También cómo no le toca el bolsillo a los que más tienen y cómo premia a los defraudadores.
Los socialistas hemos decidido poner en marcha esta iniciativa porque no vemos ni un sólo resquicio al diálogo, al acuerdo con el Partido Popular a pesar de haberle tendido todas las manos posibles y de haber instado a la negociación al Gobierno en múltiples ocasiones sin obtener ningún resultado. Rajoy y los suyos andan instalados en la torre de la mayoría absoluta desde la que diseñan y ejecutan brutales operaciones de cirugía económica contra todos los ciudadanos, sin oír a nadie, sin escuchar el clamor de una ciudadanía que ya no aguanta más la asfixia económica a la que está siendo sometida y la retirada masiva de derechos amparados en la excusa de la crisis.
La campaña se centra fundamentalmente en explicar que los socialistas le decimos NO a los recortes que se han aplicado en dependencia y que suponen dejar desamparados a miles de ciudadanos, pagar más por los servicios, bajar su calidad y poner en la cuerda floja a los miles de trabajadores del sector.
De igual manera decimos un NO alto y claro a los abusos del PP contra nuestra sanidad. Desde el 1 de julio se aplica el copago farmacéutico y los mayores, los pensionistas, los enfermos crónicos y las personas con enfermedades raras son los más castigados. Y esto es sólo el principio ya que el Ejecutivo de Rajoy ha previsto que más adelante habrá que pagar las prótesis externas y el transporte sanitario no urgente, lo que afectará a pacientes que acuden a sesiones de hemodiálisis, rehabilitación y otro tipo de terapias.
Si todo esto ha sido dolorosísimo para miles de familias, el castigo a los parados, a los desempleados, no tiene nombre. Recortar las prestaciones por desempleo, eliminar el subsidio especial para mayores de 45 años, la ayuda de 426 euros para los desempleados que agotaban prestaciones o el Plan Prepara - que permitía tener a los parados unos ingresos mensuales mientras recibían formación - es condenar a su suerte a miles de almerienses, a miles de personas que no van a tener ni para darle de comer a sus hijos.
Los recortes del PP no solucionan la crisis, no crean empleo ni reactivan la economía. Son recortes ideológicos para imponer un modelo de desigualdad en el que la protección se centra en la banca, cuyo rescate lo vamos a pagar todos los españoles. Protegen a los ricos, a los que los recortes ni les han rozado, a los defraudadores les proporciona una amnistía fiscal, la gota que colma el vaso, y fríen a impuestos a los trabajadores, pensionistas, familias y enfermos. ¿Se puede llegar a ese extremo de injusticia social? ¿Se puede ser más insensible con los más necesitados? Los socialistas creemos que no, por eso salimos a la calle. Salimos a la calle para decirle No a Rajoy.
Los socialistas hemos decidido poner en marcha esta iniciativa porque no vemos ni un sólo resquicio al diálogo, al acuerdo con el Partido Popular a pesar de haberle tendido todas las manos posibles y de haber instado a la negociación al Gobierno en múltiples ocasiones sin obtener ningún resultado. Rajoy y los suyos andan instalados en la torre de la mayoría absoluta desde la que diseñan y ejecutan brutales operaciones de cirugía económica contra todos los ciudadanos, sin oír a nadie, sin escuchar el clamor de una ciudadanía que ya no aguanta más la asfixia económica a la que está siendo sometida y la retirada masiva de derechos amparados en la excusa de la crisis.
La campaña se centra fundamentalmente en explicar que los socialistas le decimos NO a los recortes que se han aplicado en dependencia y que suponen dejar desamparados a miles de ciudadanos, pagar más por los servicios, bajar su calidad y poner en la cuerda floja a los miles de trabajadores del sector.
De igual manera decimos un NO alto y claro a los abusos del PP contra nuestra sanidad. Desde el 1 de julio se aplica el copago farmacéutico y los mayores, los pensionistas, los enfermos crónicos y las personas con enfermedades raras son los más castigados. Y esto es sólo el principio ya que el Ejecutivo de Rajoy ha previsto que más adelante habrá que pagar las prótesis externas y el transporte sanitario no urgente, lo que afectará a pacientes que acuden a sesiones de hemodiálisis, rehabilitación y otro tipo de terapias.
Si todo esto ha sido dolorosísimo para miles de familias, el castigo a los parados, a los desempleados, no tiene nombre. Recortar las prestaciones por desempleo, eliminar el subsidio especial para mayores de 45 años, la ayuda de 426 euros para los desempleados que agotaban prestaciones o el Plan Prepara - que permitía tener a los parados unos ingresos mensuales mientras recibían formación - es condenar a su suerte a miles de almerienses, a miles de personas que no van a tener ni para darle de comer a sus hijos.
Los recortes del PP no solucionan la crisis, no crean empleo ni reactivan la economía. Son recortes ideológicos para imponer un modelo de desigualdad en el que la protección se centra en la banca, cuyo rescate lo vamos a pagar todos los españoles. Protegen a los ricos, a los que los recortes ni les han rozado, a los defraudadores les proporciona una amnistía fiscal, la gota que colma el vaso, y fríen a impuestos a los trabajadores, pensionistas, familias y enfermos. ¿Se puede llegar a ese extremo de injusticia social? ¿Se puede ser más insensible con los más necesitados? Los socialistas creemos que no, por eso salimos a la calle. Salimos a la calle para decirle No a Rajoy.
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